Las cocinas industriales son a la vez atrevidas y originales

El estilo industrial es atemporal

Aunque originalmente no se originó como estilo de diseño, en la actualidad es muy popular y atemporal. Se puede utilizar en casi cualquier sitio, pero cuidado: necesita espacios más grandes y suficiente iluminación para que quede bien. Es un estilo inspirado en el ambiente de las fábricas. Antes se utilizaba por ejemplo en grandes salones, oficinas, museos, cafeterías,pero poco a poco se ha ido abriendo paso en apartamentos y casas. Además de un espacio generoso, sus características son también elementos técnicos reconocidos, mobiliario y accesorios industriales y, por último, pero no por ello menos importante, materiales típicos como el ladrillo, el hormigón y la madera. Es un estilo áspero y crudo, y desde luego no da la impresión de ser barato. Tiene una sinceridad descarada, pero también romántica. Aunque suene paradójico, es cierto. Hoy en día, el estilo industrial ya no es un entorno rudo para el trabajo duro, sino una mirada nostálgica a una época pasada.

Cocina de estilo industrial

Este estilo queda bien en cocinas. Las cocinas modernas suelen tener mucho espacio, ya que también funcionan como comedor y salón. Lo ideal es tener ventanas altas. Los suelos suelen ser de hormigón o madera y se caracterizan por una cierta crudeza, sin exageraciones, al igual que las paredes sin enlucir. En general, los muebles no son muy decorativos, ni excesivamente ornamentados, sino más bien prácticos. Incluso puede ser de estilo vintage, lo que encaja bien en un espacio industrial. En una cocina de estilo industrial, encontrarás austeras estanterías metálicas, armarios con superficies lisas sin adornos pero con tornillos o tiradores a la vista.

Carácteristicas del estilo industrial

Las cocinas industriales se inspiran en el carácter abierto y útil de la cocina. Este es también el carácter original de las naves industriales, donde el estilo no era una consideración, sino la funcionalidad y el propósito. Por tanto, los cables y otros elementos técnicos pueden quedar expuestos, al igual que la calefacción y otros equipos. El diseño de la cocina también se corresponde con esto, todo está dispuesto de forma funcional y a la vez expuesta. Los componentes de la cocina, como el fregadero, el grifo, varias baldas y soportes, no son de colores resplandecientes, sino más bien negros, grises o de acero inoxidable. Esto no significa que otros colores sean tabú. Por el contrario, aquí y allá es deseable un tono llamativo para romper la uniformidad de los colores. En cuanto a los materiales, son preferibles el metal, el acero inoxidable y, por supuesto, el hormigón, pero también el vidrio o la cerámica. No olvides la madera, que da una impresión de calidez y crea una sensación acogedora. En una cocina industrial, aporta al metal un equilibrio distante y frío. Las superficies tienden a ser mates y pueden tener un aspecto desgastado. En comparación con las cocinas tradicionales, las cocinas industriales también se distinguen por su iluminación. Los sistemas de iluminación típicos son las lámparas colgantes negras, grises o de colores, pero también es adecuada la iluminación interior de los armarios o la luz necesaria sobre la encimera de la cocina.