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¿Cuánto tiempo sobrevive realmente el coronavirus en las superficies? Los científicos descubrieron que al aire libre el virus puede sobrevivir un mínimo de 3 horas en forma de aerosol. En las superficies de plástico son 72 horas, de acero inoxidable 48 horas y de cobre 4 horas. En cuestión de la ropa, no se sabe exactamente cuánto tiempo puede sobrevivir. Sin embargo, es importante saber que el coronavirus se transmite principalmente de persona a persona a través del tracto respiratorio. Por lo tanto, es poco probable que te infectes tocando la ropa contaminada. En cualquier caso, es importante seguir las precauciones higiénicas, lavarse las manos y desinfectarlas con mucha frecuencia y ponerse la mascarilla.
¿Cuáles son los principios para que tú y otros miembros de la familia no se infecten?
Lo más ideal es que la persona infectada se muda a otro lugar durante 10 días. Si no es posible, debería tener una habitación reservada solo para ella, posiblemente con un baño. En caso de que la casa no disponga de una habitación libre, es importante mantener una distancia de seguridad de al menos de 2 metros.
El riesgo de contagio aumenta tras pasar más de 15 minutos con la persona infectada en la misma habitación. El virus es más activo en interiores que en exteriores. Por eso es importante ventilar el aire con mucha frecuencia y así bajar el posible riesgo de infección.
Si todos en la vivienda usan el mismo baño, se debería desinfectar después de cada uso. En este caso vas a apreciar griferías de lavabo con sensor automático, inodoros electrónicos, mandos a distancia y dosificadores de jabón automáticos. Te ahorrarán mucho tiempo, energía y estrés durante la limpieza porque vas a saber, que nadie toca nada.
La protección de otras superficies y artículos, que se ponen en contacto con la persona contagiada, también es muy importante. Recuerda siempre desinfectar las manillas de puertas, interruptores de la luz, mesas, móviles, termómetros o mandos de la televisión. Si tocas algún objeto que pueda estar contaminado, no te toques la cara, especialmente el área de los ojos, nariz y boca, y lávate las manos inmediatamente.
Asegúrate de que la persona enferma se cambia la ropa cada día. Su ropa se debe poner en una bolsa separada y al manipularla hay que tener mucho cuidado. Siempre usamos los guantes, mascarilla y posiblemente algún mandil de protección, y la lavamos a la máxima temperatura. El paciente debería cambiar las toallas y sábanas con mucha frecuencia y lavarlas a la temperatura de 60°‒ 90°C. Para asegurar la máxima protección se recomienda plancharlas también. Si tienes algo que se puede lavar solo a 30°C, no olvides añadir el desinfectante a la lavadora con el detergente.
A veces la persona infectada puede tocar o manipular algo que no se puede desinfectar, como por ejemplo libros, carpetas, periódicos, etc. Esas cosas tenemos que ponerlas en algún lugar cerrado durante al menos cuatro días y evitar cualquier contacto.
La pandemia es una situación que nadie esperaba. Una situación complicada y difícil. Tener a alguien que se contagió del virus viviendo en la misma casa con nosotros siempre puede crear mucho estrés. Lo más importante es no entrar en pánico, mantener la calma, reforzar el sistema inmunológico y saber que al final cada tormenta va a pasar y todo va a estar bien de nuevo.